No cabe duda de que el principal objetivo del seguro de vida es dejar protegidos financieramente a los seres queridos en caso de fallecimiento repentino. Una realidad que pocos jóvenes asumen, al asociar la muerte con la vejez, una percepción que no es del todo correcta.
Según los CDC, unos 22,000 estadounidenses menores de 44 años mueren cada año de cáncer maligno, 17,900 fallecen víctimas de homicidios y 16,400 de enfermedades del corazón, por solo citar algunos ejemplos de muertes en la mejor etapa de la vida.
La realidad es que aunque la edad es un factor de riesgo importante, para fallecer solo es necesario estar vivo.
Por ello, es una magnífica idea contar con un seguro de vida cuando se es joven. En primer lugar, las primas son notablemente más baratas, y adquirirlo cuando se es joven garantiza que estas no se incrementen a lo largo de la vida.
Por otra parte, si uno es joven, sin hijos y fallece repentinamente, el seguro de vida puede ayudar financieramente a los padres a pagar el funeral y a saldar las deudas estudiantiles contraídas.
Si el joven asegurado fallece y tiene hijos y cónyuge, el seguro de vida garantizará la estabilidad financiera de la familia, permitiéndoles mantener su nivel de vida, continuar los estudios, pagar la hipoteca y construir un proyecto de vida.
Si el joven asegurado muere teniendo un negocio en sociedad, el seguro de vida librará al socio superviviente de asumir las deudas del fallecido, por lo que se recomienda que ambos socios cuenten con un seguro de vida.
En fin, si sientes amor por los tuyos no importa que seas joven, sano y soltero; la mejor protección contra la incertidumbre de estar vivo o no es contar con un seguro de vida. Si deseas un seguro de vida barato que los cuide en caso de que abandones el mundo de manera repentina, llama a Univista Insurance.
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